El alcohol puede afectar tu actividad sexual
Ya lo sabías.

La mitad de los adolescentes españoles no cree que beber 4 o 5 copas durante los fines de semana pueda afectar a su salud, según el Ministerio de Sanidad. Aunque solo un 15% lo hace para superar la timidez, un 65% lo hace por diversión y placer.
Es cierto que en la consulta algún paciente no adolescente comenta el consumo de alcohol para desinhibirse y poder tener un comportamiento “un poco más atrevido”. A pesar de que creas que te puede ofrecer algún beneficio en esa situación, nunca recomiendo ninguna clase de consumo de alcohol a mis pacientes. En ninguna circunstancia.
A nivel sexual, ¿qué te pasa con el alcohol?
Bien, un exceso de alcohol puede hacer que te cueste más excitarte. Tu mente aparentemente desinhibida, está en un cuerpo al que le cuesta reaccionar al estímulo sexual. Es decir, ante una caricia o un beso tu cuerpo no va a responder en el mismo grado ni en el mismo tiempo a como lo haría si no hubieras bebido.
Además, las erecciones serán menos rígidas y la lubricación vaginal será menor. Todo esto va a hacer que te sea más difícil completar una relación sexual. Tampoco el orgasmo escapa a los efectos del alcohol: tardará más, necesitará más estímulo.
¿Y recuerdas esa noche en la que tuviste relaciones sexuales con alguien con quien no te parecía una opción tenerlas?
Esa evaluación la harás al día siguiente.
Existen casos graves en los que incluso no recuerdas si las mantuviste o no. Es decir, los efectos del sexo no solo son orgánicos o del cuerpo, también afectan a nuestro comportamiento sexual.
Algunas prácticas sexuales que quizá no te sientes preparado/a para realizar, las llevas a cabo con un exceso de alcohol. Eso puede ser peligroso porque puedes tener consecuencias físicas y mentales.
Y, por último, el exceso de alcohol hace que sea más probable que no utilices protección.
Eso no puede pasar.
La protección en las relaciones sexuales evita no solo el embarazo, también las infecciones de transmisión sexual (ITS). Atención porque las ITS no son solo el VIH (SIDA) o el virus del papiloma humano, también lo son unos hongos vaginales en pacientes sexualmente activas o una uretritis (secreción de pus por el conducto de la orina con molestias).
Así que, ya sabes, alcohol y desempeño sexual no van a ser muy buenos amigos.
Te leo en comentarios.
Saber más:
https://www.mscbs.gob.es/campannas/campanas11/alcoholenmenoresnoesnormal/sabias.html